SOS Corporación Alimentaria espera formalizar con la banca acreedora el acuerdo de reestructuración de su deuda financiera, que supera los 1.100 millones de euros, en torno al 31 de julio, según la información remitida por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a requerimiento del regulador.Previamente, el grupo confía en cerrar en torno al 30 de junio un protocolo de intenciones (Memorandum of Understanding) que recoja los aspectos básicos a incluir en el acuerdo de refinanciación.
El documento enviado a la CNMV, firmado por el consejero delegado de SOS, José Manuel Muriel, recoge que el proceso de negociación con las 51 entidades financieras acreedoras comenzó "tras los eventos que dieron lugar a la reformulación de las cuentas anuales al comienzo del segundo trimestre de 2009", en referencia a la destitución de los anteriores ejecutivos, Jesús y Jaime Salazar, por supuestas irregularidades durante su gestión.
Según detalla, empresa y comité de coordinación ('steering committee') de la banca han trabajado "con intensidad" en el desarrollo de un plan de refinanciación y de optimización de la estructura de capital, con el objeto de formalizar un acuerdo que cumpla con los requisitos de la Ley Concursal y permita la viabilidad financiera de la sociedad a medio y largo plazo.
A la fecha de la carta al regulador (12 de mayo), la compañía estaba negociando una prórroga del acuerdo de espera ('stand-still') hasta el 31 de mayo, una hoja de términos y condiciones básicos del acuerdo de refinanciación de la deuda y una propuesta de reestructuración de la estructura de capital que requiere el acuerdo previo de la sociedad y de "determinados accionistas".
SOS ya presentó el viernes pasado a sus entidades acreedoras una propuesta de acuerdo con el fin de reducir su deuda al entorno de los 500/550 millones de euros al cierre del ejercicio 2016.
El plan contempla una serie de operaciones corporativas consistentes en ampliaciones de capital, propuesta de conversión voluntaria de participaciones preferentes en capital y otras propuestas de conversión de la deuda actual en capital y créditos participativos. El apartado de desinversiones no incluye la venta del negocio del arroz y de los activos inmobiliarios del grupo.
Más requerimientos de datos
Además del proceso de renegociación de la deuda, la CNMV ha requerido a SOS información adicional a los datos incluidos en la auditoría de 2009.
Entre otros apartados, el regulador pide a la compañía que justifique la "aparente incoherencia" entre el crecimiento medio de las ventas usado para calcular el deterioro de las unidades generadoras de efectivo entre 2009 y 2013 (entre el 3,5% y el 4,5%) y el que se desprende del plan de negocio para el mismo periodo (3,4%).
A este respecto, el grupo alimentario precisa que los crecimientos medios de las ventas recogidos en el plan varían para cada negocio y mercado entre un 0% y un 6%, si bien la tasa agregada de crecimiento de los negocios del grupo se sitúa en el 3,4%. Para los principales negocios y mercados en los que opera la compañía, el plan incluye crecimientos esperados en un abanico del 3,5% al 4,5%.
En relación con su negocio de 'diversificación', SOS manifiesta su objetivo de materializar la venta de la empresa de dátiles Bernabé Biosca "con la mayor rapidez posible".
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